Jorge Toyama, abogado penalista, manifestó que el 70% de la población económica activa (PEA) del país trabaja de forma presencial y que, de este porcentaje, se ha detectado que el nivel de ausentismo laboral se ubica en alrededor del 30% como consecuencia de la tercera ola de COVID-19.
“Varía en cada sector. Algunas agencias de banco no están funcionando (…), incluso las unidades mineras están alargando sus jornadas para que los trabajadores tengan menor exposición al contagio”, señaló.
De igual manera, comentó que las personas que realicen trabajo presencial y no quieran vacunarse pueden ser colocadas bajo la modalidad de suspensión perfecta de labores, dejando de recibir un sueldo.