La petrolera española Repsol ha presentado una reclamación a los propietarios del petrolero italiano Mare Doricum y sus aseguradoras por el derrame de petróleo de más de 10.000 barriles de crudo en las costas peruanas, ocurrido el pasado 15 de enero.
En ese sentido, Jaime Fernández-Cuesta, presidente de Repsol Perú, aseguró el viernes ante la Comisión de Pueblos Andinos, Amazónicos, Afroperuanos, Ambiente y Ecología del Congreso peruano que la fuga de crudo fue causada por el “movimiento anómalo” del buque petrolero cuando se descargaba el hidrocarburo de la terminal 2 de la refinería La Pampilla, ubicada en Ventanilla.
“La posición nuestra es que esta rotura, este derrame, se ha producido por un movimiento anómalo del buque”, indicó.