De acuerdo con el Ministerio de Comercio Exterior y Turismo (Mincetur), la cantidad de visitantes que llegó al Santuario Histórico de Machu Picchu fue de 319,648 en el primer semestre del año, lo que representó una disminución del 25% frente a similar periodo del año anterior.
Dicha variación obedeció al menor flujo de asistentes extranjeros y nacionales. El primer grupo descendió en 68,682 personas en el periodo de análisis, mientras que el segundo en 37,947.
Según el Mincetur, si se compara el flujo de visitantes a la ciudadela durante el primer semestre frente a similar lapso de 2019, el número de extranjeros es menor en 62% y el de nacionales es inferior en 32.1%.
Los problemas asociados con políticas populistas del gobierno de Pedro Castillo serían la principal causa.
LOS PROBLEMAS
Berner Caballero, presidente de la Cámara Regional de Turismo de Cusco, precisó a Perú21 que la mala decisión de la exministra de Cultura, Betssy Chávez, de conceder la venta de 1,000 entradas en Aguas Calientes, ha terminado por maltratar a los turistas extranjeros.
Caballero explicó que esto ha originado que los visitantes tengan que alojarse en la referida ciudad en busca de entradas y tengan que hacer colas y pagar en efectivo para acceder a la ciudadela.
Juan Stoessel, CEO de Casa Andina Hoteles, responsabilizó al Ministerio de Cultura por esta situación, debido a que la venta de las 1,000 entradas mediante boletería ha originado falsificación y retrasos para que los turistas se queden más tiempo en Aguas Calientes.
DATOS
De enero a julio llegaron 1.3 millones de turistas al país, una cifra mayor en 38.5%, respecto a similar periodo de 2022.
La llegada de turistas chilenos se duplicó en los primeros siete meses del año y lideró entre los extranjeros. F: Perú21
