Este fin de semana, la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA) colocará en órbita una nueva tecnología de láser infrarrojo que busca revolucionar las comunicaciones y la transmisión de datos entre el espacio y la Tierra. La iniciativa se toma de cara a un futuro regreso tripulado a la Luna en el 2025.
“Nosotros queremos tener un sistema de comunicación con el que podemos enviar más datos, poder comunicarnos más frecuentemente y enviar más información cuando enviemos de regreso personas a la Luna y si tenemos en mente a Marte”, expresó Javier Ocasio, gerente de Integración y Pruebas de la misión LCRD.
Asimismo, precisó que es una órbita que se escogió para facilitar la comunicación con las primeras dos estaciones terrestres construidas en California y Hawai, a las que se sumarán otras dos. Una en la Estación Espacial Internacional (ISS) en 2022 y otra más adelante como parte del programa lunar Artemis.