El Gobierno, a través de decretos supremos oficializó el estado de emergencia en Pataz y Trujillo por el plazo de 60 días, con el fin de luchar contra la delincuencia y la violencia en la región de La Libertad.
En Trujillo, será la Policía Nacional quien asuma el control del orden interno, contando con el apoyo estratégico de las Fuerzas Armadas.
Las autoridades van a combatir contra el incremento de la delincuencia, derivado del aumento de los delitos de hurto, robo agravado, homicidios, sicariato, extorsión, secuestro, minería ilegal y delitos conexos que ha generado gran incertidumbre en la zona norte del país.
Por otro lado, la provincia de Pataz verá una dinámica diferente, donde las Fuerzas Armadas llevarán el liderazgo en el control de la seguridad, recibiendo colaboración de la policía para reforzar sus esfuerzos.
“En Pataz, hemos visto con estupor cómo se ha registrado el sabotaje a torres de alta tensión -7 torres voladas-, atentados con dinamita, (y) crecimiento descontrolado de la minería ilegal. Enfrentamos a más de 20 bandas organizadas (…) Lo que hemos encontrado es la peor expresión respecto a lo que puede pensarse acerca de la seguridad ciudadana: extorsiones, explotación laboral, explotación sexual, proxenetismo, tráfico de armas, tráfico de insumos químicos”, señaló Otárola.
Foto: RPP
